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Tips para no perder la cabeza cuando haces Home Office


Hacer home office es un gran reto a implementar en muchas empresas por sus grandes ventajas y beneficios, tanto para la misma empresa como para los empleados. Además, evitas gastos de tiempo y dinero. Nadie extraña estar atorada en el tráfico a las 7 de la mañana mientras te maquillas. Pero hay muchos retos y distracciones de trabajar desde casa. En este artículo te vamos a dar unos tips para que seas la mejor en tus días de home office.

 

 

Establece tus horarios

Al estar en casa, es tentador quedarse más tiempo en la cama o ver una serie en el horario de oficina. Para ser más productiva, es importante respetar una rutina profesional: levantarse siempre a la misma hora, arreglarse como si fuera a la oficina (bañarse, vestirse, desayunar) y “marcar tarjeta”, aunque eso signifique solo prender la computadora.

 

 

Tu propio espacio

Adecúa un lugar fijo y equipado con todo lo que necesitas en el día a día: una silla cómoda, una mesa funcional, material de oficina, wifi potente, agua, snacks, etcétera. Trabajar en la cama, o en diferentes espacios no establecidos (como el comedor o el sofá) puede ser poco profesional, ya que es más difícil separar cuando estás sola con tu computadora conectada, haciendo otra cosa, que cuando estás realmente trabajando.

 

 

No estás disponible

Para quien o quienes viven contigo puede ser difícil entender que estás en casa, pero no estás de vacaciones y no estás disponible para resolver problemas. Es necesario dejar claro cuál es tu horario de trabajo y que trabajar desde casa es igual como si estuvieras trabajando de manera presencial en tu empresa.

 

 

Sal de vez en cuando

Si trabajas desde tu casa, almuerzas en casa, tomas un café en casa y resuelves todo por teléfono, date un respiro y sal. En este modo de vida, existe un alto riesgo de pasar días sin ver la luz del sol. Organiza almuerzos con amigos, toma un café cerca, camina o sal en bicicleta a la calle. Esto también te ayudará a cambiar el chip de modo trabajo a «relax».

 

 

Ejercita tu concentración

Aprovecha para deshacerte de lo que no te gusta del ambiente en la oficina – mucho movimiento, teléfonos sonando, conversaciones en tono alto, reuniones a toda hora – pero cuídate de no reemplazar todo por otras distracciones, como tu cómodo sofá, celular, mascota o Netflix.

 

 

Organiza tu espacio

Si tu ambiente de trabajo es tu casa, necesitas tener la seriedad de oficina. Mantén la casa limpia, las cosas en su lugar y tu escritorio en orden. Perder el tiempo recogiendo o limpiando tu escritorio, va a generar falta de concentración.

 

 

Termina tu día laboral

Al estar en casa, puedes terminar extendiendo tus horas de trabajo (solucionar un mínimo problema, responder a mensajes de correo electrónico) sólo porque ya tienes la computadora abierta. Cuando las personas sienten que les está rindiendo, terminan alargando el día de trabajo, ya que la sensación de productividad es buena. Siempre habrá demanda, pero eso no quiere decir que necesitas resolverla inmediatamente.

 

 

Separa lo que es urgente de lo que no es y desconéctate. Tan necesario como la disciplina para empezar el día de trabajo es tener la disciplina para terminarlo, o terminarás trabajando 24 horas, sin darte cuenta.

 

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